Para los jerséis y camisetas, lo ideal es doblarlos uno encima de otro y colocarlos en baldas. Una sugerencia es quitar las pestañas que sostienen las baldas del armario y sustituirlas por unas guías, con lo cual convertirás la balda en una bandeja extraíble, facilitando la elección de la prenda que deseas. Otra idea es adquirir alguna práctica caja decorada que encaje en la medida de la balda, con lo que la conviertes en un cajón. Esto es muy recomendable para prendas de colores claros, las cuales conviene tener cubiertas, para que no se empolven. Se aconseja doblar las prendas en no más de tres pliegues, para que no queden muy marcadas y no abulten demasiado.
Ropa interior
Lo adecuado es que tanto ropa interior, como calcetines y lencería lo guardes en cajones, dividiendo el interior de los cajones con un sistema de tablillas, adquiriendo un organizador o si eres manitas haciendo unos prácticos organizadores de tela, con las dimensiones que se adapten a tus necesidades.
La lencería lo mejor es doblarla hasta formar un cuadrado. Para los sujetadores, mete los tirantes dentro de las copas, y para los calcetines es mejor poner cada par uno encima de otro y doblarlos por la parte del talón. No es aconsejable meter uno dentro del otro, pues esta práctica hace que el elástico se deforma muy pronto. (Las fotos de abajo son de venca.es)
No hay comentarios:
Publicar un comentario