
Para limpiar bien el polvo:
El paño ha de estar limpio y se lleva doblado, pues así se puede cambiar de doblez y siempre se utiliza una parte del mismo.
Se ha de quitar el polvo de todas las superficies, no sólo de los tableros horizontales, sino también de los paneles verticales, puertas, travesaños y patas.
El paño se desliza por los muebles en líneas paralelas, no en espiral, para evitar dejar esquinas sin limpiar.
Normalmente en toda la habitación hay objetos que limpiar con el plumero; esto se hace antes de utilizar el paño de polvo sobre el resto de las superficies, pues el plumero únicamente levanta el polvo sin recogerlo, y por lo tanto pueden ensuciarse los objetos colocados debajo.
En cada habitación hay que seguir un orden, comenzar por la entrada y seguir alrededor hasta llegar de nuevo al punto de partida; en cada parte, se ha de limpiar primero las zonas altas e ir bajando.
(Información del CEICID)
No sé si me pueden ayudar, he leído y leído pero no encuentro forma de solucionarlo. En mi habitación siempre hay muchísimo polvo y el problema es que si limpio a fondo, al otro día ya hay polvo de nuevo. Es un lugar relativamente pequeño y de hecho cambié de escritorio porque el otro sentía que guardaba aún más polvo y al menos me funciona porque es más fácil limpiar, pero todo lo demás siempre lleno de polvo, además soy alérgico al mismo, no sé si hay algún tip o forma de mantener en menor medida el polvo.
ResponderEliminarEl polvo, un poco lo generamos nosotros, pero sobre todo, entra de fuera. Por eso en el campo hay menos polvo que en las ciudades. Un clima húmedo, suele tener menos polvo que uno seco. Los arboles también recogen el polvo y nos llega menos.
EliminarUna casa en un primer piso tiene menos polvo que la misma casa en el 4º...
Tienes que cerrar la ventana de la habitación y abrir sólo para ventilar unos minutos cuando sea necesario.
Cuando limpies el polvo de tu habitación hazlo siempre con una bayeta de microfibras húmeda así retirarás el polvo de verdad.
Y el polvo hay que quitarlo a todo. Hasta de las patas de los muebles y por debajo, donde no se ve. No todo los dias así de a fondo, pero si una vez a la semana o más si tienes tanto.
Y la primera vez, despues de leer esto, remángate, coge un escobón de techos y lo pasas a los techos de la casa y las paredes. Esperas un rato que se pose en los muebles lo que has quitado. A continuación con la bayeta húmeda, limpia mueble por mueble a fondo: encima, debajo, patas, etc. etc. y cosa por cosa igual.
Mientras limpies techos y paredes abre la ventana, luego cierra.
Espero que te vaya bien.
Esto es un problema de "arquitectura" y alergia, más que de otra cosa. Se le podría recomendar que hable con un arquitecto o diseñador de espacios interiores para que le dija si la habitación tiene mucha ventilación cruzada, que suele ser la causa principal cuando se acumula tantísimo polvo. Saludos
EliminarDesgraciadamente el problema que planteas no tiene fácil solución, pues a pesar de que limpiemos nuestra casa no podemos controlar nuestro entorno, así que no hay trucos mágicos que eliminen el polvo de nuestras casas de manera radical, pero sí podemos llevar a cabo varias medidas que contribuyan a limitar la cantidad de polvo que penetra en nuestra casa y facilitar la limpieza del que logre entrar.
EliminarEn primer lugar, y aunque parezca obvio hay que identificar cuál es el foco de entrada del polvo en nuestra casa.
Si vives en una casa tipo chalet, dúplex, etc, que tenga un jardín es posible que el polvo venga del jardín, para lo cual te aconsejo que pongas un felpudo en la puerta de entrada y salida del jardín y te limpies bien al entrar a la casa. Valdría la pena incluso hacer un camino adoquinado en el jardín para evitar pisar la tierra y que metamos polvo, insectos y suciedad en casa.
Si vives en un piso analiza si es sólo tu cuarto o toda la casa la que padece el mismo problema. Quizá sean sólo las habitaciones cuyas ventanas dan a un lado concreto: una carretera, una calle muy congestionada, una fábrica, etcétera, o toda la casa debido a que tu ciudad sufre en general de mucha contaminación. Según sea el caso deberás implementar algunas medidas en tu cuarto o en toda la casa.
Acostúmbrate a limpiarte los zapatos antes de entrar en casa en el felpudo, y sacúdelo al menos una vez a la semana. Si ya está muy hundido y no atrapa suciedad cámbiálo.
Coloca un zapatero a la entrada de casa y guarda en él los zapatos y ponte zapatillas o el calzado que prefieras para estar en casa, mientras no sea el mismo que usas para caminar por la calle. Te sorprenderás de cómo esta sencilla medida reduce considerablemente la cantidad de polvo en tu casa.
Cuantas menos cosas tengas a la vista menos lugares tendrá el polvo para acumularse, y más fácil se te hará la limpieza. Quita las alfombras, moquetas, muebles tapizados, edredones gruesos y cojines, pues son lugares donde se acumulan el polvo y los ácaros, y se hace difícil su limpieza. Siempre es más fácil limpiar suelos lisos: madera, azulejo, ...
Utiliza un protector de colchón y una funda de almohada antiácaros, esto evitará que el polvo quede atrapado en el colchón y en la almohada y que los ácaros empeoren tu alergia. Aspira una vez a la semana el colchón y la almohada.
Quita las cortinas, o en caso de ser realmente necesarias sustitúyelas por unas delgadas, que no atrapen polvo.
Cuando limpies el polvo hazlo siempre de arriba hacia abajo, primero los muebles, usando un trapo y algún spray que ayude a que el polvo se quede en el trapo y no en el aire. Además algunos contienen partículas que contribuyen a repeler el polvo y mantienen los muebles limpios por más tiempo. Después de pasar el trapo barre o pasa la aspiradora y por último friega el suelo. En este caso optaría mejor por pasar la aspiradora en vez de barrer, para asegurarme de mover la menor cantidad de polvo. Vacía el filtro o el depósito de la aspiradora cada vez que la uses.
Procura ventilar a primera hora de la mañana un ratito o a última hora de la tarde, cuando haya menos movimiento en las calles.
En casos extremos vale la pena no abrir las ventanas del área por donde penetre más polvo, abrirlas en otras zonas de la casa y crear un poco de corriente para que se renueve al aire. Otra solución puede ser colocar una malla tipo mosquitero en las ventanas por donde entra más polvo, o bajar un poco la persiana cuando abras la ventana para ventilar.
Si tienes aire acondicionado recuerda cambiar los filtros según lo indique el fabricante.